15 de abril de2020: 82 aniversario de su fallecimiento. 
Muchos que escribieron sobre Vallejo comienzan citando unos versos que escribió, porque resulta una evocación muy poética. Me voy a permitir citar esos hermosos y tristes versos. Se equivocó César Vallejo.
No murió un día jueves, como había predicho, sino que fue un viernes. Él había anticipado: “Me moriré en París con aguacero, / un día del cual tengo ya el recuerdo. / Me moriré en París – y no me corro- / tal vez un jueves, como es hoy, de otoño. (del poema Piedra negra sobre una piedra blanca, incluido en el libro Poemas humanos). Porque murió en París, un viernes, muy tristemente.
Había nacido el 16 de marzo de 1892 en la localidad de Santiago de Chuco, Perú, con algunos estigmas encima: mestizo y provinciano, y el último de 11 hermanos. Después de cursar el bachillerato, y de haber vacilado ante la posibilidad de ser sacerdote católico, se instaló en Lima para estudiar Medicina, que después cambió por Derecho. Pero, finalmente, supo que sería poeta y estudió Literatura. Pero no culminó ninguna carrera universitaria, y fue poeta, el más grande de Perú y uno de los mayores de América Latina. También destacó como periodista y docente.
En 1919 publicó su primer libro, Los heraldos negros, con el que fue premiado. Y en 1922 le siguió Trilce poemas escritos en la cárcel a la que fue a parar por un equívoco. Trilce, cuando estaba influido por el modernismo en extinción, fue un experimento para la creación de un nuevo lenguaje. Increíble! En varias ediciones los editores o tipógrafos consideraron que los versos tenían erratas, errores ortográficos o errores tipográficos. Y se los corrigieron! No habían entendido nada. Un comentario de Luis Alberto Sánchez, prestigioso académico y crítico literario, que después fue rector de la mayor universidad de Lima, dictaminó que esos versos eran incomprensibles y estrambóticos. 50 años después, un catedrático chileno de la Universidad de Wisconsin se tomó la molestia de escribir 565 páginas para hacer un profundo estudio de ese poemario de Vallejo. En sus trabajos posteriores, Vallejo comenzó a introducirse en experimentos poéticos de mayor densidad, como el dadaísmo y el surrealismo. Experimentó también en la narrativa, en donde más directamente que en su poesía se mostró emparentado con el realismo social, denunciando los abusos que se cometían contra los indios y los trabajadores. Tuvo una estrecha relación con José Carlos Mariátegui, el fundador del Partido Comunista del Perú y de la revista Amauta, en la que Vallejo colaboraba.
Después de haber sido perseguido por su participación en actividades de izquierda, en 1923 llega a París sin dinero y sin saber hablar francés. Nunca más volvería al Perú. Sufrió estrecheces económicas y debió acudir a la ayuda de sus amistades, varios de los cuales eran militantes comunistas e intelectuales de izquierda, como Pablo Neruda y Tristán Tzara.
Católico de nacimiento y casi sacerdote, empezó a acercarse al marxismo. Viajó a la Unión Soviética en 1928 y conoció a Vladimir Maiakovski, el gran poeta de la Revolución rusa iniciador del futurismo en la poesía (y que se suicidó en 1930, después de que su trabajo fuera calificado de “individualista”). En años posteriores, Vallejo viajó a la URSS, aunque mantuvo una cierta distancia con algunas propuestas de la línea comunista.
Expulsado de Francia por “indeseable”. Se instaló en España, donde se relacionó con Miguel de Unamuno, Federico García Lorca y Rafael Alberti, apoyando intensamente la República. Finalmente, se afilió al PC español en 1932. Poco después, regresó clandestinamente a Francia desde apoyó intensamente a la República durante la guerra civil, recaudando fondos para la lucha. Su poesía refleja en esos años esa adhesión, Publicó artículos y varios poemas, entre los que destaca el muy conocido España, aparta de mí ese cáliz.
Amargado y abrumado por sus dificultades económicas y por una enfermedad derivada de un viejo paludismo, murió en París, como queda dicho, un viernes 15 de abril de 1938, a los 46 años de edad. Llovía, estoy seguro.
Su obra poética completa se puede leer en: http://www.neilveliz.com/Cesar%20Vallejo%20Obra%20Poetica%20Completa.pdf
